Bajo las gotas de agua que caen mientras te duchas rápidamente para ir a dormir, quizá puedan surgir algunas preguntas filosóficas muy comunes para algunos, no tanto para otros: ¿Por qué estoy aquí? ¿Por qué todo está tan perfectamente calculado en la naturaleza? ¿Por qué soy tomado en cuenta por la vida? y más allá de la procreación ¿Por qué existo? Y es que para ser sinceros, no pedimos venir, y hablo de que no pedimos que exista la naturaleza siquiera, los campos, los ríos, las aves, los mares, todo el ecosistema que nos rodea incluso... A pesar de la maravilla que esto representa, perdimos el asombro a la vida, el asombro a existir, caminamos apurados bajo un hermoso arco iris, olvidamos lo que realmente vale la pena, y así, muchos años pasan hasta que por alguna razón caemos en depresión, surgen los suicidios, las enfermedades... es que reprimimos tanto nuestro verdadero SER, que nos olvidamos por completo de la verdadera esencia de existir... y no hay culpas recriminables en esto, porque la verdad es que no es tan sencillo despertar, yo re-descubro esta Verdad cada vez que esas gotas caen sobre mi cabeza, tapo mis oídos con las manos y escucho la lluvia perenne de la existencia.
Probablemente hay muchas cosas que no entendemos a nivel lógico, incluso nos cuesta entender el porqué de los dolores, pero es que si no elegimos existir, realmente quiere decir que hay un plan perfectamente diseñado para que reconozcamos nuestro inmenso poder, unificando Voluntad-Sabiduría-Amor en nuestras vidas, y éstas son energías que encontramos únicamente dentro de nosotros mismos, en el silencio de nuestro SER, ya que allí habita la potencia de una galaxia entera, tengamos en cuenta que nosotros mismos somos un micro-cosmos activo. Hay algo más allá de toda esta realidad ilusoria, algo que debemos hallar internamente primero, algo que solo se sabe al reconocer la lluvia de nuestra existencia.
No hay comentarios:
Publicar un comentario